Luis Serieys Zárate
16/06/2026
Durante la primera semana de comparecencias de alcaldes y alcaldesas ante las comisiones unidas de Administración Pública Local, de Alcaldías y Límites Territoriales y de Gobierno y Políticas Públicas del Congreso de la Ciudad de México, al parecer mágicamente nada pasa en Alvaro Obregón, Azcapotzalco, Benito Juárez, Coyoacán, Cuauhtémoc, Iztacalco, Iztapalapa o Magdalena Contreras, vivimos sus habitantes en un mundo “color de rosa” en donde Las respuestas a los cuestionamientos nunca llegan.
Pero hoy hablaremos en especial de la alcaldía Iztapalapa en donde pareciera ser que los intereses de grupos, todos incluidos en la alianza gobernante de la Transformación, no le permiten gobernar a Aleida Alaves y sólo simulan trabajar para seguir cobrando sus salarios.
Eso sí, no tienen tiempo de atender a la ciudadanía, a menos que ya enojadas cierren vialidades importantes como la calzada Ignacio Zaragoza o la de Ermita Iztapalapa para que aparezcan los funcionarios que termina por ser los únicos que sí trabajan.
Un caso como éste en donde tienen los vecinos de las unidades en la llamada zona de “El Salado” en la entrada a la Ciudad de México para quienes vienen de entidades como Puebla, Tlaxcala, Veracruz o Oaxaca en la calzada Ignacio Zaragoza obligan a las autoridades a aparecer como la dcifrector de la Territorial Acatitla de Zaragoza, de nombre Janet Prieto que sólo aparece para tomarse la foto y nada atiende de las demandas de los vecinos.
A decir de los vecinos de esa zona oriental de Iztapalapa, la directora territorial está buena para la fiesta, pero cuando alguien pregunta por la atención a sus necesidades la contundente respuesta es “de eso no voy a hablar porque ya se que no he cumplido”.
Y claro, ante cualquier reclamo y se dice que en la intimidad de sus oficinas, advierte que ni la molesten porque a ella nadie la va a mover de la dirección territorial Acatitla de Zaragoza por está muy bien respaldada, “no saben con quien se meten”, la clásica advertencia de quienes su única virtud es ser burócratas de escritorio o de territorio apoyada por organizaciones que se caracterizan por violentas al invadir predios para convertirlos supuestamente en viviendas, eso sí, siempre con el apoyo del INVI.
De ésta persona se sabe que tiene sus orígenes en uno de los grupos de nombre Frente Popular Francisco Villa, de los que ya hay varios porque cada vez que se pelean los líderes aparecer uno nuevo con el mismo nombre, el caso de la directora se dice es el grupo liderado por el ex diputado y ahora concejal en Iztapalapa, Eli Homero Aguilar Ramírez, quién casualmente tiene una especialisdad en administración del crédito de la vivienda, aunque es licenciado en sociología.
Esperamos que éste tipo de funcionarios públicos no impidan a la alcaldesa Aleida Alavez cumplir con todos sus proyectos, sobre todo luego de haber esperado más de una década para alcanzafr ésta posición, muy peleada entre los miembros del partido oficial, porque es la que más habitantes tienen y la que más presupuesto recibe.
Perto así como Aleida Alavez presentó su informe y asegura haber hecho en unos meses muchas obras, en áreas en las que para nada se encuentran las que están más al oriente de la demarcación y limitan con el Estado de México, esas están a cargo de burócratas a los que los ciudadanos les importan “un cacahuate” como la mencionada Janet Prieto.
Pero como escribieron unos colegas hace algunas semanas sobre funcionarias de la propia alcaldía Iztapalapa, debemos recordar que entre los funcionarios de estructura también se “cuecen habas” como el caso de Anabel Acosta Rangel, coordinadora de Inclusión en la dirección General de Bienestar, área que dirige Francis Pirin a la que tampoco le importan los iztapalapenses.
Pero como al momento de formar parte del partido en el poder se vuelven “impolutos” y sus pecados anteriores se les perdonan, por eso la inhabilitación que se hizo entre 2006 y 2008 para ser servidora pública de ésta burocrata Acosta Rangel, hoy no interesa, como tampoco interesa el freude que hace algunos ayaeres hizo con una Universidad Cervantes, en la que dejaron colgados a muchos alumnos al cerrar sus puertas sin entregar documentos ni devolver colegiaturas pagadas.
Pero como lo comentamos lineas arriba al parecer a la alcaldesa Aleida Alavez sólo le interesa poder ocupar la silla más importante de la alcaldía Iztapalapa, sin importar que para ello a la hora de que hizo su selección de funcionarios se imité a cumplir con los compromisos con los grupos que le ayudaron a llegar al poder.
Es así que no sólo entregó direcciones territoriales por concesión a los grupos que movilizaron gente para que votaron por ella, sino que entregó espacios en áreas de atención a los iztapalapenses a personas con antecedentes de prepotencia y de sólo atender los asuntos que su jefa Francis Pirin le diga que debe atender.
Por eso la coordinadora de Inclusión, en la dirección general de Bienestar, que precisamente dirige Francis Pirin, piensa que su pasado no la va a alcanzar y su trayectoria cuyo principal logro fue la mencionada inhabilitación por 2 años para ser funcionaria pública.
Lo único que podemos concluir con tan sólo dos casos de los muchos funcionarios que trabajan para la alcaldía Iztapalapa, de los que no todos, dicho sea de paso, tienen que atender directamente a la ciudadanía, es que mayormente ocupan puestos por sus antecedentes de participar en política en grupos que hoy por hoy controlan la alcaldía movilizando a sus seguidores en todo momento, sea para votaciones, sea para eventos en la propia alcaldía o el Zócalo y que de atender sus obligaciones poco se acuerdan.
serieys@hotmail.com